Gong Fa: descubre los cimientos del Kung Fu (3)

Continuamos con nuestro apreciado Gong Fa. En esta ocasión vamos a explicar el tercer principio de los fundamentos del Kung Fu Shaolin.

Los tres vacíos: San Kong

Este principio trata sobre el entrenamiento de la mente y lo determinante que resulta en el camino de las artes marciales.

Xin Kong. El vacío del corazón

El vacío del corazón es un concepto profundo que se refiere a la necesidad de liberar nuestra mente de pensamientos y emociones. A primera vista, puede sonar contradictorio o incluso aterrador, pero en realidad es un camino hacia la paz interior.

Nuestra mente vive llena de distracciones constantes: preocupaciones, estrés, ansiedad, miedos y expectativas. En consecuencia, los pensamientos y emociones nos abruman y nos impiden experimentar la plenitud y la tranquilidad. Vaciar el corazón nos invita a dejar de lado todas estas cargas y encontrar la calma en medio del caos.

Realizar esto no es una tarea fácil. Tampoco debemos engañarnos con la creencia de que sólo meditando y respirando profundo vamos a lograrlo. No existe una receta, tan sólo se puede lograr a través del permanente trabajo en uno mismo. En ese proceso sincero, nos damos cuenta de que no somos nuestros pensamientos ni nuestras emociones, sino seres conscientes que pueden elegir cómo reaccionar ante ellos.

Debemos recordar que esto no significa vaciar nuestra vida de todo significado o emoción. Más bien, implica dejar de identificarnos con nuestros pensamientos y emociones, y en su lugar, conectarnos con nuestra verdadera esencia. Al hacerlo, descubrimos una sensación de paz y plenitud que trasciende las fluctuaciones de la mente.

En el contexto de las artes marciales, el estrés y la ansiedad que genera cualquier tipo de enfrentamiento son motivo para que la mente deje de ser eficiente, provocando falta de claridad y sensación de bloqueo. Con el entrenamiento adecuado, y exponiéndote de forma progresiva a diferentes niveles de estrés, puedes familiarizarte con esas sensaciones y lograr transformar el estrés en algo positivo, que actúe en tu beneficio.

Sheng Kong. El vacío del cuerpo

El vacío del cuerpo trata sobre la habilidad de relajar el cuerpo, los músculos y las articulaciones para lograr una mayor eficiencia de reacción y movimiento. Este concepto se basa en la idea de que, al liberar la tensión acumulada en nuestro cuerpo, podemos mejorar nuestra postura, reducir el estrés y aumentar nuestra energía.

La práctica de la relajación, es una buena forma para comprender y profundizar en esta idea de vaciar el cuerpo. Para llevarlo a acabo es importante encontrar un lugar tranquilo donde puedas estar cómodo y relajado. Puedes hacerlo sentado o acostado, lo importante es que encuentres una posición en la que te sientas relajado y puedas concentrarte en tu cuerpo.

Una vez que estés en la posición adecuada, cierra los ojos y comienza a prestar atención a tu respiración. Toma varias respiraciones profundas, inhalando por la nariz y exhalando por la boca. Con cada exhalación, imagina que estás liberando la tensión y el estrés acumulados en tu cuerpo.

A medida que te concentras en tu respiración, comienza a escanear tu cuerpo en busca de cualquier tensión o molestia. Puedes comenzar por los pies y subir lentamente hacia arriba, prestando atención a cada parte de tu cuerpo. Si encuentras alguna tensión, respira profundamente y visualiza cómo se disuelve.

Una vez que hayas recorrido todo tu cuerpo, concéntrate en los músculos de tu rostro. Relaja los músculos de la frente, las mejillas y la mandíbula. Deja que tu rostro se relaje completamente.

Durante todo el proceso, es importante recordar que no se trata de forzar la relajación, sino de permitir que suceda de forma natural. Si sientes resistencia o tensión en alguna parte de tu cuerpo, simplemente obsérvala y déjala ir. No te juzgues a ti mismo ni te frustres si no puedes relajarte por completo de inmediato. La práctica constante te ayudará a mejorar.

Con un hábito de práctica regular, notarás que te sientes más relajado, con menos tensión y estrés. También puedes experimentar una mayor claridad mental y una sensación de bienestar general. Además, esta técnica puede ayudarte a mejorar tu postura, reducir el riesgo de lesiones relacionadas con la tensión muscular y potenciar la velocidad y explosividad de tus movimientos.

Mu Kong. El vacío de los ojos

El vacío de ojos es un concepto muy interesante, se refiere a tener una mirada vacía de intención y de juicio. En el contexto del arte marcial, este concepto se traduce como la capacidad de no dar nada por hecho, al mismo tiempo que hace muy difícil la lectura de tu estado emocional al oponente.

En las artes marciales, la expresión facial y la mirada pueden revelar información crucial sobre las intenciones y emociones de un combatiente. Sin embargo, el vacío de ojos busca eliminar cualquier indicio que pueda dar ventaja al oponente. Al mantener una mirada neutra y sin expresión, se evita que el oponente pueda anticipar nuestros movimientos o leer nuestras intenciones.

El vacío de ojos requiere de un alto nivel de concentración y control emocional. Para ello, el dominio y comprensión adecuado de los dos principios anteriores es fundamental. Crear una conexión visual con el oponente, junto al lenguaje corporal, es esencial para entrar en la lucha mental, un aspecto del combate que puede determinar el resultado.

La dimensión estratégica de este concepto nos lleva expresar aquello que deseamos que el oponente crea sobre nosotros, en forma de engaño y condicionamiento. El no expresar juicio o intención Esto nos da una ventaja estratégica, ya que podemos sorprender al oponente o generar en él falsas ideas.

Conclusión

El principio de los tres vacíos es complejo y abstracto como los anteriores, ya que explica habilidades físicas y mentales que tan sólo pueden obtenerse baja una práctica muy disciplinada y constante a lo largo del tiempo.

Debemos recordar que estos conceptos han sido desarrollados por auténticos guerreros y luchadores que vivían un contexto en donde su vida corría un peligro real en el campo de batalla. En esas circunstancias, viendo morir personas y luchando contra otras por la supervivencia, no cada duda de hasta que punto tomas en serio tu entrenamiento y tu preparación, cuando cada detalle puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.

En la actualidad estos conceptos nos son útiles, pero bajo una lectura diferente. Dirigida a perfeccionar y aumentar la eficacia de nuestra práctica marcial, la cual, como ya hemos dicho en varias ocasiones abarca el entrenamiento físico y mental. En un contexto de compañerismo, disfrute y superación personal.